06 junio 2007

El as en la manga de los anti-Murdoch

Bastaría que un 9,1% de los accionistas tipo B de Dow Jones no vendiera sus acciones a Murdoch para que siguieran controlando la empresa editora del Wall Street Journal. Esa es la conclusión principal de una información publicada por el International Herald Tribune al hilo de la reciente oferta de compra de DJ lanzada por News Corporation. Según este diario, la estructura accionarial de DJ es la siguiente:

- Hay 63,7 millones de acciones del tipo A, que se negocian en la Bolsa de Nueva York.
- Existen unos 20 millones de acciones del tipo B, de los que los Bancroft poseen 16,4 millones y la familia Ottaway - que se niega radicalmente a la venta-, unos 1,6 millones (un 8%).

Las acciones tipo B se caracterizan porque tienen diez veces más derechos de voto que las del tipo A. Es decir, un accionista del tipo A tiene un voto por cada acción; un accionista del tipo B tiene 10 votos por cada acción. Esto explica que los Bancroft psean 164 millones de votos de un total aproximado de 263,7, es decir, poco más del 62%.

¿Cuál es el as en la manga? Cuando un accionista de tipo B vende sus acciones, éstas pierden su poder de voto B y se convierten en acciones tipo A. Es decir, su derecho de voto se reduce de 10 a 1 y por lo tanto, las acciones que vendan los Bancroft a Murdoch dejarían de ser acciones "privilegiadas" y su poder de voto sería el normal en el mercado (1 acción = 1 voto). La consecuencia lógica de todo esto que es si un 9,1% de los accionistas tipo B se niegan a vender sus acciones, seguirían conservando mayoría de voto en la compañía.

Como afirma el propio IHT, es dudoso que Murdoch no haya tenido en cuenta este detalle, pero no dejará de ser interesante comprobar cómo podrían hacer frente a esta situación.

Todo el artículo, aquí.

No hay comentarios: